Conectados con Cristo (Juan 15:1–8)
La vida cristiana no es una religión de simples prácticas o de actividades, sino una relación de conexión continua con Cristo. De esa conexión fluye todo fruto espiritual.
La fe sincera (Hechos 5:1–11)
La historia de Ananías y Safira nos enseña que Dios aborrece la falsa piedad y valora una fe sincera y humilde, pues no puede ser engañado por apariencias externas.