El poder del evangelio (Hechos 3:1-10)
Idea central
Dios transforma vidas a través del poder del evangelio, y nuestra respuesta debe ser una vida de gratitud y adoración.
Contexto bíblico
Pedro y Juan subían al templo a la hora de la oración cuando se encontraron con un hombre cojo de nacimiento, que pedía limosna en la puerta llamada "la Hermosa". Al verlo, Pedro le dijo que no tenía plata ni oro, pero que en el nombre de Jesús de Nazaret se levantara y caminara. En ese momento, el hombre fue sanado y comenzó a caminar, saltar y alabar a Dios. Todo el pueblo lo vio y se asombró al reconocer que era el mismo que antes pedía limosna.
Expliquémoslo
1. El evangelio es suficiente (vv. 1–6)
Mientras Pedro y Juan se dirigían al templo una tarde para orar, se encontraron con un hombre que había sido cojo desde su nacimiento y que pedía limosna. Cada día, otras personas lo colocaban en la puerta del templo para que pudiera pedir ayuda y así sobrevivir. Esta era la vida a la que estaba acostumbrado, pero todo estaba a punto de cambiar. Desde la perspectiva del mendigo, él había aceptado su condición como algo permanente y creía que no había otra forma de vivir. De la misma manera, a veces nos aferramos a un estilo de vida o una mentalidad de necesidad y dolor, creyendo que siempre viviremos en escasez o quebranto. Pero Dios desea intervenir y traer restauración y esperanza. Él no solo promete bendiciones eternas, sino que también quiere mostrar su bondad aquí en la tierra (Salmo 27:13). Él puede convertir nuestro lamento en gozo y darnos un nuevo comienzo.
Desde la perspectiva de Pedro y Juan, el encuentro fue inesperado. No tenían oro ni plata para suplir la necesidad temporal del hombre, pero sí tenían algo mucho mayor: el evangelio y el poder de Dios. En el nombre de Jesús, hablaron vida al hombre, y él recibió una sanidad milagrosa. Tal vez no estemos enfrentando lo mismo que ese hombre, pero muchos a nuestro alrededor sí lo están. A veces pensamos que si tuviéramos todo el dinero del mundo, podríamos hacer una gran diferencia. Aunque el dinero puede ayudar, su efecto es temporal. Lo que tenemos como creyentes es mucho más poderoso. El evangelio produce una transformación duradera. Es el poder de Dios para salvación a todo aquel que cree (Romanos 1:16).
Dios no quiere que vivas atado al pasado o a la escasez, Él desea restaurarte y mostrarte su bondad aquí y ahora
Qué aprendemos: El evangelio es suficiente para cambiar vidas
Preguntas para discutir
¿Qué te llama más la atención del encuentro entre Pedro, Juan y el hombre cojo? ¿Por qué?
2. El agradecimiento produce una vida de adoracion (vv. 7–10)
Después del encuentro del hombre cojo con Pedro y Juan, en ese mismo instante recibió su milagro. Tras no poder caminar desde su nacimiento, finalmente lo hizo. Él esperaba recibir dinero, pero Dios le dio algo mejor, algo que nunca pensó que sería posible: caminar. Su reacción ante el milagro que recibió nos enseña mucho sobre cómo deberíamos responder nosotros cuando recibimos algo del Señor.
Lo primero que debemos entender es que el propósito de los milagros no es simplemente asombrarnos. Muchas personas reciben un milagro de parte de Dios y luego se olvidan de Él. El propósito de los milagros es mostrar el poder de Dios y llevar a las personas a la salvación. En el caso del excojo, lo primero que hizo fue entrar al templo, saltando y alabando a Dios. Su vida estaba llena de gratitud. Y es precisamente la gratitud lo que nos lleva a alabar con libertad. Lo hacemos porque Dios ha sido bueno con nosotros. Siempre debemos alabarlo y no olvidar de dónde nos sacó (Salmo 103:1-2).
La gratitud nos lleva a alabar a Dios con libertad y pasión
Qué aprendemos: Debemos demostrar gratitud ante lo que Dios a hecho por nosotros
Preguntas para discutir
Pedro y Juan no tenían dinero, pero sí tenían el poder de Dios. ¿Cómo puedes aplicar esta verdad en tus propias circunstancias cuando enfrentas necesidades o limitaciones?
¿Has sido testigo de una transformación o un milagro que cambió radicalmente la vida de alguien? ¿Cómo reaccionó esa persona ante lo que Dios hizo?
Llamado a la acción
Busca esta experiencia que la Biblia enseña: el con el Espíritu Santo. No es solo una doctrina, es una promesa viva para ti hoy. Dios desea llenarte con su Espíritu para darte poder, valentía y dirección. No limites lo que Él puede hacer en tu vida por tus experiencias pasadas o temores. Hoy es un buen día para pedir con fe, esperar con obediencia y recibir con humildad. ¡Él quiere usarte para impactar a otros con el poder del evangelio!